Contacta a tu compañía de seguros lo antes posible:
Tan pronto como ocurra el incidente, comunícate al número de asistencia de tu compañía de seguros (aquí te los compartimos para que los conozcas). La mayoría de las pólizas tienen un plazo para presentar reclamaciones, así que es importante hacerlo lo antes posible.
Proporciona la información necesaria:
La compañía de seguros te pedirá detalles sobre el incidente. Esto puede incluir el número de identificación, la placa del vehículo, el número de la póliza, la fecha, hora y ubicación del incidente, una descripción detallada de lo que ocurrió y cualquier documentación relevante, como fotografías, informes policiales, facturas médicas, etc.
Completa los formularios de reclamación:
La aseguradora probablemente te proporcionará formularios de reclamación que deberás completar. Asegúrate de llenarlos con precisión y proporcionar toda la información solicitada. Para diligenciar los formularios de manera correcta puedes apoyarte con tu asesor de seguros.
Proporciona pruebas de la pérdida:
Es posible que se te pida que proporciones pruebas que respalden tu reclamo. Esto puede incluir recibos, facturas, presupuestos de reparación, o cualquier otro documento que respalde el monto reclamado.
Coopera con la investigación de la compañía aseguradora:
La aseguradora puede llevar a cabo una investigación para evaluar la validez de tu reclamo. Cooperar plenamente durante este proceso puede acelerar la resolución. Si tienes alguna duda o consulta relacionada con este proceso, no dudes aclararla con tu asesor de seguros.
Obtén un estimado de reparación:
Si estás presentando un reclamo por daños a la propiedad o a tu vehículo, es posible que necesites obtener estimados (cotizaciones) de reparación para respaldar tu reclamo. Cuando se trata de reclamaciones de salud o de vida, debes presentar facturas d
Recibe la resolución de tu reclamación:
La compañía de seguros revisará toda la información proporcionada y tomará una decisión sobre tu reclamo. Te informarán sobre la resolución y, si es aprobado, te proporcionarán las instrucciones sobre cómo recibir el pago. En el caso en el que la reclamación sea objetada y sientas que no está justificada dicha objeción, puedes comunicarlo a tu asesor de seguros para que escale el caso nuevamente a la aseguradora y realicen una segunda verificación.
Es importante recordar que cada reclamo puede ser único y los detalles específicos pueden variar según la póliza y la compañía de seguros. Además, es fundamental revisar cuidadosamente tu póliza para comprender los términos, condiciones y coberturas específicas antes de presentar un reclamo. Si tienes dudas, puedes comunicarte con tu asesor de seguros para obtener orientación adicional y acompañamiento durante todo el proceso.